El Madrid sigue intentando que el Barça suba sus líneas para cazarles con un balón largo o un sprint. El Madrid toca muy bien y muy rápido. Hay pocos atacantes en el mundo con esa capacidad de esfuerzo y voluntad para presionar que tiene Vinicius. La misma consiste en que cada equipo lance penaltis de forma alternada hasta totalizar 5 cada uno.