A nivel nacional, su consagración llegaría en las semifinales del Campeonato Europeo Sub-21 de 1988: el 27 de abril de 1988, contra Inglaterra en Highbury, fue autor de los dos goles que clasificaron a su país para la final. «El mejor filial del mundo». 5 de abril de 1988 fue sancionado tres meses por una brutal entrada con las dos piernas a Michel Der Zakarian, del F.C.